La noticia que sorprendió al mundo profesional e intelectual fue el anuncio del presidente de El Salvador, Nayib Bukele (ver aquí), sobre la oferta de 5,000 pasaportes a profesionales altamente calificados para que desarrollen sus trabajos en su país. La iniciativa invitaba a científicos, ingenieros, médicos, artistas y filósofos destacados del extranjero, ofreciéndoles una serie de beneficios excepcionales. Su gobierno se comprometía a facilitar la reubicación de estos profesionales, garantizando un 0% de impuestos y aranceles sobre el traslado de familias y activos. Esta medida representa un cambio significativo en la estrategia del país, que anteriormente había enfrentado desafíos en materia de criminalidad y ahora apuesta por el desarrollo científico y tecnológico.
Un pequeño país, grandes oportunidades: El Salvador apuesta por el talento internacional
El objetivo es posicionar a El Salvador como un destino atractivo para la ciencia y tecnología, ofreciendo condiciones favorables para el desarrollo profesional y personal de estos profesionales.
(americasistemas.com.pe. Lima, Perú – 10 de abril 2024) En medio de la constante comparación entre realidades gubernamentales, surge un ejemplo que resalta por su innovadora estrategia para impulsar el desarrollo de su país. El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ha dado un giro inesperado al ofrecer oportunidades a científicos, médicos, filósofos y otros profesionales de todo el mundo para desarrollar sus habilidades en su territorio, con beneficios que incluyen exención de impuestos y derecho al voto ciudadano. La criminalidad y delincuencia ya quedó atrás, asegura.
El mandatario salvadoreño ha entendido que el verdadero valor de una nación reside en su capital humano, especialmente en aquellos talentos calificados que pueden aportar al progreso y la innovación. Esta iniciativa, que ha despertado una envidia sana en otras latitudes, se presenta como un claro ejemplo de visión y compromiso con el futuro de su patria. Sabe que su país no se puede quedar como un mero exportador de bananas, frutas y otros.
Tras enfrentar desafíos como la criminalidad y la delincuencia, Bukele no se conforma con mantener el statu quo. Su apuesta por la ciencia y la tecnología como motores de desarrollo a mediano y largo plazo demuestra una visión global impresionante, con un profundo amor y compromiso por su país. Este enfoque no solo busca un beneficio inmediato, sino que pretende dejar un legado a las generaciones futuras, sacándolas del abismo de la ignorancia que gobiernos pasados han dejado en el Estado salvadoreño.
Recordamos el ejemplo del científico peruano Modesto Montoya, quien en sus años jóvenes contactó a la embajada americana para obtener una visa y fue recibido con prontitud y atención especial, invitándolo incluso para que resida en Estados Unidos, muestra cómo los países que se preocupan por su desarrollo constante actúan para atraer talento. Este gesto no solo reconoce el valor de los individuos calificados, sino que también demuestra una visión de futuro que trasciende las fronteras nacionales.
En un contexto donde las comparaciones son inevitables, la apuesta de El Salvador por el talento internacional se presenta como un faro de esperanza y ejemplo a seguir para aquellos países que buscan transformarse y alcanzar nuevos horizontes de desarrollo. En nuestro país, las autoridades del ejecutivo y legislativo no tienen la menor idea de lo que pasa en otros lares. Envidia sana amigos lectores.
