En el marco del Protection Cybersecurity Summit 2025, la gerente de Operaciones SOLA (Perú–Chile) de SecureSoft, Ruth Sánchez, ofreció una de las charlas más rescatables del evento: “Ética en la Ciberseguridad: Entre la Protección y la Tentación”. Con datos reveladores y experiencias reales, abordó cómo las empresas enfrentan dilemas éticos frente a ciberataques, cuestionando decisiones como el pago de rescates y resaltando la importancia de la integridad organizacional. El enfoque humano, el compromiso de la alta dirección y las buenas prácticas certificadas fueron pilares de su exposición. Un mensaje claro: sin ética, no hay verdadera ciberseguridad.
“La Ciberseguridad no es solo Técnica: Lecciones Éticas desde SecureSoft”
La cita central y rescatable fue: la ética no es un lujo corporativo, sino el cimiento sobre el cual debe sostenerse toda estrategia de ciberseguridad.
(americasistemas.com.pe. Lima, Perú – 04 de junio 2025) En el marco del Protection Cybersecurity Summit 2025, uno de los eventos más importantes del sector tecnológico de la región, la charla titulada “Ética en la Ciberseguridad: Entre la Protección y la Tentación”, dictada por Ruth Sánchez, gerente de Operaciones SOLA (Perú – Chile) de SecureSoft, se convirtió en una de las exposiciones más impactantes y aplaudidas por el exigente auditorio de especialistas.
Con una elocuencia serena y sólida, Sánchez abordó un tema pocas veces tratado con tanta profundidad y crudeza en el mundo corporativo: la delgada línea que separa el actuar ético de las decisiones tentadoras que surgen ante ataques informáticos de alto impacto.
“La ética es uno de los pilares estratégicos de SecureSoft. Podemos tener las mejores tecnologías, pero al final, quien decide es el ser humano”, sentenció ante un público que siguió su intervención con atención reflexiva.
Una mirada cruda a las cifras
Sánchez presentó resultados del estudio EY 2024 sobre ética empresarial, que retratan un entorno preocupante:
– En Perú, el 80% de los encuestados considera un desafío mantener la integridad en tiempos difíciles.
– El 27% afirma que nunca ha escuchado a su alta dirección hablar sobre integridad.
– Un 33% indica que las organizaciones adoptan comportamientos poco éticos si están involucrados ejecutivos o trabajadores “estrella”.
Pero no todo es pesimismo. La misma encuesta revela que un 69% de las empresas considera haber mejorado en materia de integridad durante los últimos dos años.
El dilema: ¿Pagar o no pagar?
Uno de los momentos más rescatables de la charla fue cuando Sánchez puso en evidencia el comportamiento de las empresas frente a los ataques de ransomware:
– El 47% pagó el rescate y logró recuperar la información.
– El 17% pagó, pero no logró recuperarla.
– El 25% que no pagó tampoco pudo recuperar sus datos.
Con claridad y determinación, Sánchez advirtió que pagar a ciberdelincuentes no solo es riesgoso, sino que podría considerarse una actividad ilícita bajo la legislación peruana, enmarcándose como financiamiento de actividades delictivas.
Experiencia y acción desde SecureSoft
La gerente no solo habló desde la teoría. Detalló cómo, a través del centro de respuesta a incidentes de SecureSoft (SILU), han gestionado 66 incidentes de alto impacto en 12 sectores y 6 países. Sectores como el financiero, educativo y minero están entre los más afectados.
A modo de cierre, enfatizó la importancia de contar con procesos sólidos, certificaciones internacionales (como ISO 27001, 22301, 9001 y 37001) y una alta dirección comprometida con la ética. Solo así, remarcó, se puede estar preparado ante la inevitable amenaza de un ciberataque.
“No se trata de si serás atacado, sino de cuánto estás dispuesto a perder si no estás preparado, si no actúas con ética”, finalizó.
Aspectos finales de la charla: En tiempos donde los valores pueden diluirse entre decisiones difíciles, la intervención de Ruth Sánchez dejó una huella firme en el Protection Summit: la ética no es un lujo corporativo, sino el cimiento sobre el cual debe sostenerse toda estrategia de ciberseguridad. Un llamado urgente a CEOs, CIOs, CISO y líderes empresariales a mirar más allá de la tecnología, hacia lo que realmente sostiene la confianza: el comportamiento humano.
